lunes, 21 de mayo de 2012

Eurocopa 2012. Polonia y Ucrania


Todavía con la imagen vívida de la carrera del “niño” Torres superando al veloz Lahm y, con un toque sutil pero letal, venciendo al veterano arquero Lehmann para dar a la selección española el título, nos aprestamos a disfrutar de una nueva edición del Campeonato Europeo de Fútbol de la UEFA. 

Las 16 mejores selecciones europeas de este ciclo se medirán en los gramados de Polonia y Ucrania para alzarse con el prestigioso trofeo Henri Delaunay entre el 8 de junio y el 1º de julio de 2012.

Luego de un proceso que se inició en el año 2005, el presidente de la UEFA, Michel Platini anunció desde Cardiff, el 18 de abril de 2007, la disposición de conceder la sede a los dos países de este del continente. La elección relegó a las candidaturas de Italia  y la combinada de Croacia y Hungría. Será la primera vez que esta competición se alojará en naciones con husos horarios desiguales.

Esta candidatura, que por 3ª vez se realiza por dos países en conjunto, presentó desde un comienzo serias dificultades de organización, logística e infraestructura. Ni polacos ni ucranianos han organizado eventos deportivos de alta envergadura. Los servicios autoviales se encontraban en lamentable estado y, a cinco años del inicio del evento, cuatro de los estadios todavía eran proyectos sobre planos. Si adicionamos a lo anterior una importante crisis por corrupción arbitral y la interferencia del gobierno polaco en la realización de un torneo doméstico, realmente puso a esta edición en serios aprietos de disputarse. Incluso ya se habían propuesto algunas alternativas para mudar la sede. Pero el apoyo de la gran mayoría de la población de ambos países y la promesa de los dirigentes locales para solventar tales problemáticas, inclinaron el platillo a favor de esta candidatura.

Con Polonia y Ucrania clasificadas como naciones organizadoras, el resto de Europa  se vio inmersa en el un proceso de clasificación que se mantuvo por 13 meses hasta llegar, el 2 de diciembre de 2011, al Palacio de las Artes de Kiev para que, ante representantes de las 16 mejores naciones europeas, se dirimiera el orden de los grupos de la fase final. 
Cada país tendrá 4 estadios. El partido inaugural entre Polonia y Grecia se realizará en el Estadio Nacional de Polonia de Varsovia con más de 55 mil locaciones y la final se realizará en el Olímpico de Kiev, con 77 mil asientos. En ambos recintos se jugarán las semifinales.

Con estos antecedentes, ya podemos comenzar a entonar nuestras pasiones en espera de disfrutar de las genialidades de jugadores como Cristiano Ronaldo, Silva, Iniesta, Rooney, Sneijder, Robben, Ozil, Benzema, Balotelli, Modric, Arshavin, Ibrahimović, Schweinsteiger y un largo etcétera de talentos en pos de la meta rival con el anhelo de lograr la gloria de levantar la copa que en su tiempo levantaron figuras como Netto, Luis Suárez, Facchetti, Beckenbauer, Panenka, Krol, Platini, Gullit, Laudrup, Blanc, Nikopolidis y, por última vez, Iker Casillas.

jueves, 17 de mayo de 2012

El origen de la Eurocopa de Naciones


La Eurocopa es el campeonato de selecciones nacionales masculinas de fútbol más importante de Europa. Lo organiza la UEFA cada cuatro años, en alternancia con el Campeonato Mundial de Fútbol y justo antes de los Juegos Olímpicos. Estos tres torneos se consideran los espectáculos deportivos más prestigiosos y más seguidos a nivel mundial.

Su primera edición, conocida entonces como Copa de Naciones de Europa o Copa de Europa, tuvo lugar en 1960 tras superar décadas de dificultades y burocráticos obstáculos.

En 1927, al igual que Pierre Coubertin con los JJ OO, Jules Rimet con la Copa del Mundo y Gabriel Hanot con la Copa de Campeones, otro francés, Henri Delaunay, secretario de la Federación Francesa de Fútbol en ese entonces, junto al oficial austriaco Hugo Meisl, presentó una propuesta a la FIFA para la creación de una Copa de Europa, similar al Campeonato Sudamericano que ya se jugaba el desde 1916 en el nuevo continente.

Su proyecto no tuvo mayor acogida debido, sobre todo, a la intención de celebrar la 1ª Copa del Mundo y, tras esa primera tentativa en 1927, la propuesta se archivó en el maremagno que era la FIFA de la época.
En 1954 el dirigente francés, como presidente de la Federación Francesa de Fútbol y primer Secretario General de la recién nacida UEFA, volvería a acometer la idea apoyado por varios países europeos y con el soporte del diario deportivo L'Equipe. 

Delaunay expuso después de la asamblea inaugural de la UEFA en Basilea en 1954 que la idea era la de una competición abierta a todas las federaciones europeas. El dirigente insistió en que esta competición no debía acarrear un número infinito de partidos ni debía afectar al Mundial.

Desafortunadamente, esto no sería nada fácil, ya que Alemania, Inglaterra e Italia, entre otras naciones, se opusieron y Delaunay murió en 1955 antes ver concretado su proyecto. El testigo lo recibió su hijo Pierre, quien culminó el proyecto en 1957 cuando se realizó el Congreso en Estocolmo. La pasión e interés expresado por el persistente dirigente francés hizo que el trofeo fuera nombrado en su honor como «Coupe Henri Delaunay».

Pierre Delaunay fue investido secretario del Comité Organizador de la Copa de las Naciones Europeas para seguir de cerca el desarrollo de la competición que su padre hubiera querido.

Las primeras ediciones se caracterizaron por la poca notoriedad y presencia en la sociedad. Se instituyeron unas eliminatorias con partidos de ida y vuelta, hasta las semifinales, que se disputarían a partido único en una misma sede. El asiento de la primera fase final del torneo fue en Francia en 1960, en honor a la memoria de su mentor. A partir de 1968 pasó a denominarse Copa de Europa de Naciones.

Este sistema, donde la fase final la disputaban tan sólo 4 equipos, se mantuvo vigente hasta 1976. La cantidad de naciones en la fase decisiva se duplicó para la edición de 1980, número que aumentaría a los actuales 16 competidores a partir de la Eurocopa de 1996. A partir del año 2016 serán 24 los países representados en la instancia definitiva.

Todos estas oncenas participan después de clasificarse en un proceso exclusivo organizado por la UEFA con la totalidad de los países afiliados; la única excepción la constituye el equipo anfitrión de la fase final, el cual se clasifica automáticamente.

A la fecha, el sueño de Henri Delaunay, se ha convertido en una competición de prestancia cosmopolita y su propio éxito ha permitido el surgimiento de otras competencias análogas como la Eurocopa Femenina y la Eurocopa Sub-21.